Estamos viviendo tiempos sumamente agitados, con distintos procesos en continuo desarrollo, llenos de sucesos que se actualizan día a día y que poblan nuestros feeds y nuestra mente. Indudablemente, dos de los eventos más importantes son el plebiscito venidero sobre la nueva Constitución y la emergencia sanitaria provocada por el COVID-19, los cuales inevitablemente se entrecruzaron y es necesario enfrentar de manera cuidadosa, pues sabemos que el riesgo ante la situación no es cero y que estamos ante importantes momentos definitorios de nuestro futuro.
A la hora de ir a votar, hay varias cosas que hay que tener en cuenta en este contexto, como el andar con la cédula de identidad (la cual no deberá ser tocada por quien oficie de vocal), el uso obligatorio de mascarilla (idealmente quirúrgicas, desechables y de tres pliegues), la necesidad de andar con alcohol gel (del 70%), el deber de mantener un mínimo de 1 metro de distancia con el resto, traer tu propio lápiz pasta azúl y llevar agua por si te toca estar mucho tiempo en el sol. Es importante mantener el cuidado, la precaución y el respeto en todo momento. Estas y otras normas generales pueden ser vistas acá por completo.
Por supuesto, las medidas de higienización y seguridad correspondientes serán implementadas en todos los locales (en donde las mesas se instalarán a las 8:00 y empezarán a funcionar cuando haya un mínimo de 3 vocales presentes). El personal dispondrá de un kit sanitario para garantizar la limpieza, además de kits para electores en caso de alguna contingencia. El protocolo sanitario, publicado en el diario oficial, puede ser revisado por completo acá. Referente a esto, es importante saber que electores deberán quitarse la mascarilla por un máximo de tres segundos para demostrar su identidad como parte del proceso.
En conjunto con todas estas medidas y consideraciones, hay que tener en cuenta que en Chile existen más de 2.800.000 personas en situación de discapacidad y es por ello que se les debe apoyar para la correcta realización de este proceso tan importante que afecta a todo el país. Nadie se debe restar. Por ello, se permite la asistencia de una persona de confianza del elector como acompañante, además de contar con apoyo del personal presente y de protocolos para evitar aglomeraciones y un flujo continuo. Existirá especial cuidado para personas con dificultad visual o movilidad reducida a la hora de sufragar. Las plantillas braile, disponibles en todas las mesas, o con ranuras para la emisión del voto para electores con discapacidad visual serán desinfectadas después de cada utilización.
Personas en grupos de riesgo, embarazadas, con movilidad reducida o adultos mayores tendrán atención preferencial y especial reserva en su cuidado sanitario y de quienes les acompañen. Referente a este último grupo, mayores de 60 años tendrán un horario exclusivo (14:00 a 17:00 hrs). Fuera de ese horario, tendrán trato preferente para votar durante todo el proceso de votación. Otros electores podrán votar en este rango horario siempre que no haya mayores de 60 años esperando.
También, otro de los protocolos que el Servel publicó recientemente -de forma tardía- trata sobre el respeto al nombre social de personas trans, sus pronombres y el trato digno generalizado. No se revelarán las identidades específicas de quienes cambiaron su nombre y sexo registral. En ningún caso se debería discriminar, tampoco, a quienes no han realizado cambios en su registro. Vocales de mesa deberán contar con toda la información necesaria para manejar correctamente estas situaciones y cualquier caso especial o contingencia que pueda aparecer. Es posible revisar el protocolo en su totalidad en el link de acá.
